Teorías truncas, parte II

No era de esperarse que me demorara tanto en volver a escribir, pero caramba, la vida es de ripley.
Bueno, este debate se prolongaría hasta las 2:30 AM, quizás un poco más, pero no cumplimos con nuestro intento de mostrar la realidad a nuestro pata. Se imaginarán como quedaron cada uno de los integrantes, dentro de unas cuantas horas se debía ir al trabajo, y dormir poco, muy poco en días laborables, como que no alegra los ánimos.
Ahora, tenemos a un pata que lucha contra las injusticias del mundo, pensando aún que el Perú es la tierra con la cual soñamos cuando estabamos en el cole. No tengo nada contra el optimismo, creo que en el Perú, no sólo hace falta, sino que muchas veces la realidad nos impide ser optimistas.
Considero que esa es la consecuencia de unos padres demasiados permisivos, que siempre que un hijo necesita algo se lo dan. La experiencia se hace en la calle, desde el momento en que te encuentras en la necesidad de tener algo de dinero, desde ese momento te das cuenta de las cosas y se termina el cuento de hadas. Serás uno más del montón en tus inicios, pero luego te distinguirás, si es que realmente eres bueno.
Come on, this is the real life and of course, there´s only one.